En el precio de una vivienda influyen varios factores que pueden hacer incrementar notablemente el valor de un inmueble. Al margen de los gustos y necesidades que condicionan esta búsqueda, también hay que tener en cuenta los factores que aumentan el precio de la vivienda cuando buscamos casa.
Además, el valor de las viviendas también cambia en función de la oferta y de la demanda, de manera que, cuando hay mucha demanda y la oferta es escasa, sube el precio.
Sin embargo, hay otros factores que influyen en el precio siempre.
Factores que influyen en el precio de una vivienda
Ubicación
Es el primer requisito que marca la compra de la vivienda y a la vez es uno de los factores que más condicionan su valor.
Aunque dos propiedades sean muy similares, su localización puede hacer variar su valor, simplemente dependiendo del barrio donde estén ubicadas.
En general, en el centro de las ciudades el valor de las casas es más alto que en los barrios periféricos.
Orientación, altura y luminosidad
Estos factores son bastante codiciados por los compradores. A la hora de decantarse por la compra de un inmueble, estos elementos pueden ser decisivos. La orientación nos puede indicar si una casa es fría o calurosa y si hablamos de un edificio, si es exterior o interior.
La altura es otro condicionante imprescindible para una mayor luminosidad. Por tanto, a excepción de viviendas con jardín, los pisos más elevados obtendrán mayor luz natural, mejores vistas, mayor ventilación, menor exposición a la contaminación acústica, y por todo esto, serán más demandados y caros. De hecho, cada planta añadida puede encarecer el valor del inmueble entre 1 y 2 %.
Superficie y distribución
Otro condicionante determinante es la superficie, que repercutirá directamente en el precio. Cuantos más metros cuadrados tenga, mayor será su precio. Además, contar con una buena distribución del inmueble o posibilidad de poder rediseñarla es importante.
Calidad de los materiales
La calidad de los materiales es un factor clave en la conservación de la vivienda, por lo que una casa construida con materiales de calidad se depreciará menos con el paso de los años. Se estima que una casa pierde un 15% de su valor a los 5 años de su construcción, pero si está construida con materiales de calidad no perderá tanto valor porque su deterioro será menor.
Equipamiento y eficiencia energética
Invertir en elementos como la calefacción, aire acondicionado o en la domótica aumenta su precio.
Además, si a esto le sumamos que la conciencia de eficiencia energética cada día es mayor, las instalaciones con placas solares o fuentes de energía renovables puede aumentar el valor de una vivienda.
Comprar una vivienda no es una tarea sencilla, hay que conocer muy bien el mercado inmobiliario para no confundirse con la compra que realicemos.